Evasivas

Mi palabra contra la mía. Larvas aterradas vuelan sobre mis sospechas tornadizas; caen mis palabras gruesas de concisas, se esparcen al ir cayendo, se divagan a si mismas, y se disuelven. Entonces me quedo hablando solamente por dentro, porque no soy capaz de utilizar los términos que se usan en estos casos, me es un habito eludir este tipo de inquietud. Quiero saber si me voy a librar de lo que poco a poco viene llegando. Quiero saber si no dolerá, porque ya me esta lastimando. Desearía que esto dejará de empezar, y terminase ya, de una vez por todas las que vienen; las que vienen son, decisiones, que me están costando el ser entero para realizar. Una verdadera ausencia de este sentimiento, quiero salir corriendo tranquilamente sin huir de mi propia mente y todos sus asuntos… me gustaría que supieran lo que se siente ser como soy. Ya no entiendo ni qué soy: hombre, humano, extraterrestre, escritor iletrado, sentimental, loco, incongruente, poeta, excéntrico, real, extraordinario, ñiquiñaque, raro, tonto, inteligente, miedoso, intrépido, yo mismo, otro yo mismo, un yo diferente, en fin para que juego con estas preguntas, yo sé lo que soy, basta de buscar un concepto, si un día me creí desconceptuado, y ahora sólo quiero comprensión sin sentirme ningún mártir irresoluto.